7 abr 2012

Vaso de Sangre

Tenia tiempo que no escribía en el blog así que aquí les va esta pequeña historia. Espero que les guste.

Se para la canción, busco mi teléfono porque se que eso significa una sola cosa, alguien me llama. Veo su nombre y me asusto, pienso varias veces si contestar o no, contesto. Sus palabras fueron claras y concisas, tres preguntas que con si y no se contestaban me demostraron que ya estaba todo hecho.

La música vuelve y por cosas de la vida suena La vida es una tómbola de Maru Chao mis ojos buscan a las personas que conozco pero mi mente sabe que ya no están. De repente veo a Totoro pasándome por el lado y me doy cuenta que todo es un sueño. Me voy cayendo en el piso, como si me derritiera, como si las cosas lindas de las historias nunca han existido. 

Me despierto de forma repentina y Josue esta a mi lado, durmiendo como un niño bueno. Miro a mi alrededor y veo mi habitación, al perro en la alfombra y la puerta abierta, como le gusta dejarla a Josue. Me levanto de la cama, doy par de vueltas en la habitación y salgo con paso acelerado. Paso por el pasillo repleto de ojos que me miraban y de bocas besándose. Llego a la cocina, abro la nevera y veo un vaso de sangre, frío y quieto. Me hecho para atrás sorprendida por lo que veía. Me puse las manos en la boca y la tapo con ellas, mis ojos se abren y mi cuello se voltea donde esta el cuchillo. Mis manos agarran el cuchillo, de esa forma como los asesinos en las películas lo hacen. 

Me sentía con tanto poder, miraba el cuchillo, lo admiraba y me reía sadicamente, solo me imagino como me veía, toda sexy, riéndome como una mala. Subí la vista y solo veía vasos llenos de sangre. Entonces entendí lo que debía hacer. Volví a la habitación, me puse mi vestido negro y comencé a apuñalar a Josue. 

Al segundo que deje de matarlo suena mi teléfono con la canción de Cafe Tacuba Quiero ver, voy caminando hasta donde el y me llama Josue. Contesto el teléfono y el me dice amor, quieres pizza o comida china. Yo solo le digo pizza.