8 sept 2009

Un limpiabotas me dijo


 

Un domingo, como a las 1 de la tarde, iba caminando hacia mi casa. Tuve que atravesar un barrio de ricos, el barrio de los gringos. El sol me pelaba los pies y solo veía mi cama. A lo lejos veo dos limpiabotas caminando hacia mí. Les pongo como 6 y 7 anos. Morenitos, bajitos para su edad seguramente, con una caja de limpiabotas cada uno, la ropa sucia, como para dar lastima sucia.

Tenían una conversación de la cual no pude escuchar mucho, pero parecía importante ya que me hizo una pregunta muy interesante. El más pequeño de los dos con una sonrisa en sus labios media picara e intrépida, y en ese punto pensé que me diría un obscenidad, me pregunto lo que para mí fue una confirmación de que tenía razón ante un punto de su previa conversación con su compañero.

El niño me dijo casi a gritos, ya que estaba del otro lado de la calle, "amiguita, que se puede hacer con un peso?". Ante esta pregunta me detengo, pongo mi mano de derecha en mi cadera y pienso en lo que este niño me pregunto. Misteriosamente mi respuesta no fue tal vez la que él esperaba. Mi respuesta creo que fue bastante clara, aun que creo que él no entendió mucho. Le respondí con una voz irónica "guárdalo, y ya para el próximo (peso) serán dos".

Un peso ya en estos tiempos vale nada, pero al esperar por otro le garantiza tener dos pesos y ya tienes una menta Halls. El problema no es la menta halls, es la espera. Esa respuesta puede ser sencilla pero adentra muchas cosas de la vida: la espera. Esperar por las cosas, la paciencia y tal vez un poco de desinterés nos pueden ayudar a llegar donde queremos.

Para muchos dejarle las cosas a la vida y solo seguir con lo que tenemos es muy difícil. Esto es por que creen que pueden cambiar la situación en que están, pero en mi corta vida he podido ver que lo mejor es no apresurar las cosas. Dársela en desesperado no está. Al decir esto no digo que no se debe de luchar por lo que se quiere, sino que se debe luchar en el momento adecuado, y como diría mi mama tener tacto. Si, hasta en las cosas que se quieren, desean y necesitan precisan de la maravillosa y realista espera. No es fácil, se debe reconocer, pero es lo más sensato, y en algunos casos lo mas amoroso que se puede hacer.

Muchos nos hemos cansado de que nos aconsejen que todo llegara, así que vamos a decir que sí a esperar, esperar lagrimas, momentos felices, sacrificios, besos y desgarres en la espalda, días lluviosos, parejas y negocios. "Ahorremos" nuestras decisiones para que la espera haga el trabajo, esto nos ayudara a confiar en que si hacemos las bases correspondientes a nuestros sueños podremos así lograrlos y llenar nuestras vidas de expectativas.

Si no sabes esperar, no podrás ser feliz

Gandhy Morillo

4 comentarios:

  1. Me gusto mucho este post. El que mas me ha gustado de tus escritos.

    Keep going

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  2. Oye Gahndy excelente... me impresiono mucho... vaya tienes mucho talento... te felicito...

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  3. Si no sabes esperar, no podrás ser feliz, me gusto el Post..,Gracias por la sugerencia..☺

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  4. Hey! gandhy ta cute esooo! muy buen mensajee!

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